El karma y la meritocracia en menéame

Censurocracia
Fuente: Menéame tiene ToS (J.R. Mora)
Vaya follón se ha liado en menéame con lo de banear al superusuario MMPET de Menéame no acepta críticas, seamos sinceros.
Lo comenta Ramón Ramón diciendo que las Redes Sociales se autoregulan o Javier Castilla afirmando que él ya decía hace tiempo que abría una rebelión en menéame o Juan Vega que califica a menéame como una dictadura “políticamente correcta”, y una máquina de crear opinión “asépticamente progresista”.
También hay análisis interesantes como el de Jose Perea diciendo en Abadía Digital que los usuarios son quienes mandan y el de la bitácora de VortixTM en Barrapunto sobre la caída de meneame.net.
Yo opino que con la discusión algunos han sacado la planta del tiesto. Más que nada porque si no te gusta menéame pues no lo leas. A nadie le obligan a leerlo. Si crees que te margina una élite de ególatras autoproclamados como el sheriff del pueblo. Pues te vas a otro pueblo. Total, eso es lo bueno de Internet, que siempre tienes otro pueblo al que irte.
Lo que me parece instructivo de todo el tomate que se ha liado es sacar conclusiones sobre los efectos que produce el sistema del karma. El comentario de Faryshta en Barrapunto da en la diana:
Comillas"El sistema de karma lejos de favorecer la meritocracia favorece el elitismo y la actitud de borrego. El sistema de votación de noticias y comentarios es autoritario donde ciertas personas valen más que otras en base a ‘méritos’ aunque con la forma que meneame.net interpreta ‘mérito’ es mejor dicho borreguismo.
Es decir, menéame se basa en un método por el cual los yonkis del karma adquiren rango como lo hace un sargento chusquero que asciende desde soldado raso hasta suboficial a base de reengancharse sin pasar por la academia militar.
Y luego está el problema de las guerras de flames que se montan por tocar temás tabú. Basta escribir algo como la palabra «gitano» o alusiones estilo «aquellas personas determinada étnia» para que se monte inmediatamente un circo colosal en los comentarios y contra-comentarios con dos bandos que no se respetan entre si.
Lo que está claro al menos es que fue una mala idea banear a MMPET y a sus seguidores. Sea lo que fuere que se prentendiese conseguir censurándole, los efectos parecen haber sido justo los contrarios. Para neutralizarlo hubiera sido mejor dejarle hablar y simplemente ignorarle. A los voceras normalmente no se les hace mucho caso. Winston Churchill se pasó mucho tiempo previo a la guerra diciendo que había que eliminar a Hitler, y durante esos años los pacifistas simplemente le tildaron de ser un viejo gruñón belicista y borrachuzo, hasta que fue demasiado tarde.

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