Órdago a Philadelphia, o de cómo la meritocracia continúa robando terreno al capital relacional

Siguiendo la política de diferentes ciudades en todo el mundo que están decididas a poner sus ciudades como vanguardia del Siglo XXI, la ciudad de Philadelphia anunciaba hace dos semanas la creación de un comité de doce expertos los cuales decidirían sobre la mejor opción para implantar acceso a Internet a través de tecnologías WiFi. Para ello, se iba a destinar un presupuesto de 10 millones de dólares para su implantación, así como 1.5 millones de dólares anuales para el mantenimiento de la misma, según informaba Muniwireless
Pero el anuncio que hoy Muniwireless publicaba por parte de la empresa californiana Anchor Free nos dejaba atónitos. El director lanzaba un órdago a la ciudad de Philadelphia: construir una red de hotspots en un plazo de dos meses, un 50% más barato que la propuesta lanzada. Es decir, Anchor se compromete en dos meses a proveer a la ciudad de conectividad mediante una inversión de 5 millones de dólares.
Independientemente de venir a confirmar lo que hemos escrito en alguna ocasión sobre la comoditización de la tecnología y sobre su coste de implantación, podemos extraer algunas conclusiones que nos delinean hacia donde apuntan las relaciones económicas que los organismos públicos tendrán en el futuro con respecto a cualquier propuesta tecnológica.
Comoditización del Contenido
El conocimiento se encuentra comoditizado en estas áreas. Se sabe qué se tiene que construir, se conocen los costes, por lo que inversiones más caras que lo necesario serán expuestas a este tipo de acciones. Esto era lo que se nos anunciaba hace años sobre las posibles subastas a realizar por parte de los organismos públicos de determinados concursos. El famoso G2B.
Reducción del tiempo de implantación
Gracias a los nuevos medios de comunicación como Muniwireless y la proliferacion de Internet, cualquier proveedor de WiFi puede conocer los diferentes proyectos que muchas ciudades están diseñando. Gracias a Internet y la noticia lanzada por Muniwireless, AnchorFree conoce la iniciativa de Philadelphia el primer día de septiembre. En menos de quince días esta oferta se conoce, recalcando el tiempo de implantación de la misma: sólo dos meses. Es decir, que en menos de seis meses una ciudad puede comenzar a asegurarse el futuro de su desarrollo socio económico si existe voluntad política, en otras palabras, conocimiento.
Capital Meritocrático Vs. Capital Relacional
Esta iniciativa nos demuestra una de las cuestiones que más nos interesan desde el punto de vista de evolución sociológica y económica: cómo la meritocracia continúa imponiéndose al capital relacional, gracias a los flujos de información existentes.
En el futuro que viene, no nos hará falta tanto conocer tanto al personaje de turno en el ayuntamiento para conseguir un determinado tipo de contrato, sino que será mucho más el mérito de la empresa la que consiga imponerse en el mismo. Sólo hará falta el que tengamos la tecnología, el conocimiento, y lanzar un órdago serán posibilidades reales que se tengan en un futuro como nuevo canal de comunicación.

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