Sobre la escasez del Espectro Radioeléctrico

Para aquellos que no lo sepan,actualmente el espectro radioeléctrico por el cual se transmiten cualquier tipo de emisión es considerado escaso, finito. Al considerarse finito, el Estago regula su uso para que no existan más emisiones de las cuales realmente se puedan tener, por lo que asigna diferentes usos a diferentes organismos e instituciones. Ésta es la razón por la cual por ejemplo, sólo existen 4 operadores de tecnologías 3G donde se subastaron el espacio al mejor postor, Así ocurre también para las emisoras de FM cuando sólo se asignan diferentes licencias por miedo
Sin embargo, esta escasez fue formulada durante el siglo XX para evitar los problemas de interferencias que se daban entre diferentes aparatos ante un potencial solapamiento de las frecuencias existentes. Pero esta interferencia no es causada porque el espacio como tal sea finito y no puedan coexistir diferentes señales, sino por la propia calidad de los aparatos que entienden sólo un tipo específico de radio. De esta manera la evolución propia de la tecnología permitiendo el software-defined radio, y la fabricacion de aparatos inteligentes que entienden el tipo de frecuencia que reciben, acaban totalmente con la ilusión del espectro radioeléctrico.
David P. Reed, uno de los creadores del principio end to end ha demostrado el mito de la escasez del espacio radioeléctrico; por otra parte la fundación New America también ha refutado el concepto vigesimonónico del espectro. Más recientemente Kevin Werbach ofrecía una charla en Austin sobre estos aspectos de la cual el blog de Fast Company se ha hecho eco.
Esperemos que desde España y con el nuevo gobierno entienda que significa exactamente esto de lo ilimitado del espacio radioeléctrico para poder desregular el máximo posible y no intervenir en otro Patrimonio Común de Innovación para maximizar las posibilidades de este espacio de dominio público. Sin embargo, como tengmos que esperar que el grupo de expertos de Gaptel sea quien ofrezca sus conclusiones a los responsables, apaga y vámonos… sobre todo en temas del porqué de las redes públicas, el principio de «neutralidad tecnológica» frente a «independencia tecnológica» propugnada por el software libre.